Una reflexión personal para seguir creyendo

Faltan pocos días para que los uruguayos votemos y mediante ese acto elijamos al futuro gobierno.
Detalle no menor en nuestra vida.
Un acto en el cual el gran responsable de lo que suceda a partir de marzo del año 2010 seremos aquellos que mediante el voto elegimos el domingo 25 quiénes nos gobernarán.
No solamente tendrán el cargo de Presidente, Senador o Diputado y los hasta hoy anónimos ministros o directores de empresas públicas; tendrán por sobre todas las cosas parte de nuestra vida en sus acciones. Dependeremos de su capacidad, su voluntad y básicamente de quienes hoy los acompañan.
De todas las opciones existentes yo me siento identificado con el proyecto del Frente Amplio. Ese mismo Frente Amplio que llegó por primera vez a ejercer el Gobierno Nacional y ha demostrado tener los elementos humanos necesarios como para implementar políticas que efectivamente han hecho temblar las raíces de los árboles.
Dicen algunos por ahí que el Frente no supo aprovechar la bonanza económica de al menos el año pasado. Sin entrar en detalles que la mayoría de los uruguayos desconocemos como por ejemplo lo que se denomina macroeconomía y otras yerbas, rompe los ojos que la torta comenzó a repartirse de otra manera.
Si bien lo hecho no es suficiente, es mucho mas de lo que se hizo gobierno a gobierno, antes del año 2005, sin desmerecer las virtudes que puedan haber tenido.
No atribuyo intencionalidades a quienes gobernaron el país antes que lo hiciera el Frente Amplio, pero lo cierto es que los números son elocuentes.
Aumentó el salario real de los trabajadores, si no me creés buscá un recibo de sueldo de junio de 2005 y comparalo con el del último mes. La reforma tributaria de este gobierno no te afectó y si pagás más que antes, me alegro por vos, quiere decir que tenés un salario muy bueno.
Los médicos de salud pública, que antes cobraban unos 5 mil pesos hoy rondan los 25.000. Bien por ellos. De repente no es suficiente, pero es mucho mas que los aumentos que se dieron en los gobiernos anteriores.
Las jubilaciones aumentaron, no todo lo que debería, pero aumentaron mucho más que durante los gobiernos anteriores. Se termino el privilegio de las operaciones en los ojos para poder ver. Antes había que pagar unos 3 mil dólares. Ahora los jubilados, pensionistas, los trabajadores se operan gratis.
Se termino el misterio de la computación. El Plan Ceibal no necesita ni siquiera un comentario.
La reforma de la salud, con el sistema Nacional Integrado de Salud ha comenzado a transitar un camino que seguramente tendrá nuevas medidas, pero para mejorarlo, no para eliminarlo.
Cuando el mundo desarrollado, ese que miramos hasta con cierto dejo de envidia, vemos que sufre las consecuencias de la crisis económica mundial, como contrapartida en nuestro país no sucedió ninguna catástrofe, ¡y eso que la anunciaban todos los días!.
Se consume más. Y esto es real. La mayoría de los uruguayos compra más, y sabés porqué, porque gana más. Eso sí, cada cual es responsable de lo que entra y sale de su bolsillo. Si gastas de más…
Pero existen innumerables argumentos para justificar largamente porqué debe el Frente Amplio seguir gobernando este hermoso y gran país.
Hay otros aspectos que si bien no se miden con números sí se perciben con los sentimientos.
Es que cuando el líder de un partido que pretende llegar al gobierno afirma que hay que bañar y cortarle el pelo a los que viven en los asentamientos; que algunos viven en un sucucho, y que los indigentes son unos atorrantes; como ser humano que me considero siento que se desprecia a nuestros semejantes y se tiene una actitud de soberbia tal, que impone en un primer momento un rechazo tácito a tanto desprecio por el semejante.
Quien así piense, creo debería darse primero un baño de humildad, pasarse un peine fino y quitrarse a todos los lazarillos que los rodean, entrar a la casa de todos los uruguayos con un mensaje que otorgue más certezas que incertidumbre sobre cómo será nuestro futuro.
Los candidatos han demostrado ser tan seres humanos como vos y como yo.
Con defectos, errores y virtudes. Con una historia de vida, claramente diferente una de la otra.
Y los partidos políticos también.
En esta campaña electoral he terminado de entender porqué el Frente Amplio es diferente. No solamente por su forma de gobernar, perfectible por cierto en muchas de sus acciones. Si no además por su espíritu, por su corazón, por sus sentimientos.
Te menciono un ejemplo, de aquella definición despectiva de la colcha de retazos, esa imagen se tomó y se multiplicó hasta llegar a lo que es hoy. Una gran bandera que como símbolo lleva cosida, puntada tras puntada, la esperanza de cada uno de los uruguayos que creemos que un mundo diferente es posible, un mundo mas allá del confort, de lo material. Claro lo intangible no se valora, pero que bien nos hace cuando se siente y se comparte.
Un niño puede llorar cuando le quitan un juguete, un hombre debería llorar cuando la indiferencia sea su sentimiento más fuerte.
Será por eso que formo parte de ese grupo de locos que creen en la gente, que se resigna a pensar que solamente lo que tiene precio y se palpa te hace valioso.
Quiero seguir creyendo.
Por eso te invito a reflexionar antes del domingo 25.